Biografía
Serguéi Kretov, respetable padre de familia y trabajador pacífico de la ciudad de Gryazi, en la región de Lipetsk, vive desde hace muchos años según los principios cristianos. En noviembre de 2020, su casa fue registrada durante 14 horas, el hombre fue arrestado y colocado en un centro de detención preventiva debido a su fe.
Sergey nació en 1978 en Grozny (República de Chechenia). Tiene 2 hermanos y una hermana. Su padre era militar, su madre trabajaba como maestra en un jardín de infantes y más tarde en refinerías de petróleo y granos.
Sergey se graduó de una escuela de música en la clase de acordeón. También asistió a un club de estudio de código Morse, y cuando era adolescente se dedicó al kickboxing. Debido a la inestable situación política y militar en Chechenia, la familia abandonó su hogar y se trasladó a la aldea de Nezlobnaya, en el territorio de Stávropol. Tras el divorcio de sus padres y la partida de su hermano mayor, Sergey tuvo que hacerse cargo de la familia. En la década de 1990, cuando era adolescente, trabajó a tiempo parcial para ayudar a su madre.
Después de la escuela, Sergey se graduó de la universidad con un título en ingeniería y se quedó allí como profesor. Más tarde, trabajó como ingeniero de reparación de computadoras e ingeniero de instrumentación. En su tiempo libre, estudia psicología y redes neuronales.
Desde muy joven, Sergey quiso aprender más sobre Dios. Oró para entender lo que dice la Biblia. Después de estudiar las Escrituras, le llamó la atención la claridad y sencillez de las enseñanzas de la Biblia, así como el hecho de que Dios tiene un nombre personal. Sergey decidió tomar el camino cristiano en 1997.
En 2004, Sergey se casó con Marina, quien compartía los valores de su vida. En su tiempo libre, le gusta cuidar el jardín, cocinar y leer. Después de la boda, los Kretov vivieron en Georgiyevsk (territorio de Stavropol), y en 2007 la familia se mudó a la ciudad de Gryazi (región de Lipetsk). La pareja crió a una hija, Liza. A toda la familia le encanta ver películas interesantes por las noches, jugar juegos de mesa, resolver acertijos sobre temas bíblicos.
La detención, la causa penal y el juicio fueron un duro golpe para toda la familia. Sergey dijo: "Durante 17 años de vida familiar, el tiempo que pasé en el centro de detención preventiva, en el que estuve 8 meses, fue la separación más larga de Marina. En estas condiciones, aprendimos a cuidarnos unos a otros de una manera nueva".
Debido a la persecución penal, Sergey perdió su trabajo, pero más tarde, habiendo sido liberado del centro de detención preventiva bajo su propio reconocimiento, pudo encontrar trabajo en su especialidad nuevamente en una empresa privada.