Biografía
En el apartamento de una tranquila jubilada de Rostov del Don, Olga Ganusha, se instaló una videovigilancia encubierta. En 2019, se inició un caso penal contra el creyente. En julio de 2021, el juez Viktor Trofimov declaró culpable y sentenció al creyente a 2 años de prisión suspendida.
Olga nació en Rostov del Don en 1961. Tiene una hermana mayor. Desde niña, Olga fue aficionada a la danza, el bordado, la fotografía y la costura, y en su juventud cantó en un conjunto. Después del octavo grado, ingresó a una escuela de construcción, luego trabajó como capataz en una fábrica de yeso y como mecanógrafa en una fábrica de tabaco.
Olga vivió toda su vida en su Rostov del Don natal, y solo ocasionalmente iba a Shakhty y Taganrog. Ahora está en un merecido descanso. En su tiempo libre, todavía le gusta hacer costura, escucha música clásica y lee historias humorísticas.
Durante más de 20 años, Olga ha llevado un estilo de vida cristiano. Siempre fue difícil para ella aceptar la muerte, y nunca creyó en una vida después de la muerte. Cuando aprendió por primera vez de la Biblia que las personas pueden vivir para siempre y encontrarse con seres queridos resucitados en un paraíso terrenal, su gozo no conoció límites. También estaba fascinada por la practicidad de los consejos bíblicos. A su hijo Alexei, quien, debido a las circunstancias, tuvo que ser criado solo, pudo inculcarle altas normas morales basadas en los mandamientos cristianos.
La persecución penal tuvo un fuerte impacto en la salud de Olga. Todas las enfermedades crónicas que afectan a órganos vitales han empeorado. "Mi vida se dividió en un antes y un después de la búsqueda", dice. "Hubo un miedo cuando de repente escuché un golpe en la puerta, mi sueño se vio perturbado". El hijo está muy preocupado por su madre y su salud. Aunque otros familiares no comparten los puntos de vista religiosos de Olga, no entienden por qué está siendo perseguida.