Biografía
Otro residente de Ussuriysk fue acusado de extremismo por motivos religiosos. Después de la reunión en el café donde se discutió la Biblia, Anton Chermnykh estará en el banquillo de los acusados. ¿Qué sabemos de él?
Anton nació en 1987 en Magdeburgo, Alemania, donde sus padres hicieron el servicio militar bajo un contrato. Anton tiene un hermano gemelo, Maxim. Más tarde, la familia se trasladó a una guarnición militar en Krasny Kut (krai de Primorie), y luego a Ussuriysk. El padre abandonó a la familia, no mantiene contacto con sus hijos adultos.
Cuando Anton y Maksim aún eran jóvenes, su madre comenzó a leer la Biblia e inculcó el interés en ella a sus hijos. A Antón le gustó que la Biblia responda de manera clara y clara a preguntas que muchas personas encuentran filosóficas, como cuál es el significado de la vida y por qué hay tanto sufrimiento.
Después de la escuela, Anton se graduó con un título en Informática Aplicada en Economía. Trabajó como ingeniero de software en el sector de la vivienda y los servicios públicos, y luego como trabajador en la odontología de la ciudad. Siempre me han gustado los ordenadores. Otros intereses: la pesca y el senderismo, de los que ahora no puede salir por su reconocimiento de no salir.
En 2011, Anton pidió a la oficina de registro y alistamiento militar que proporcionara un servicio civil alternativo (ACS, por sus siglas en inglés). Lo aprobó en un departamento especial de una clínica psiquiátrica, donde mienten los pacientes que han cometido delitos especialmente graves y son declarados locos. Paradójicamente, ahora una persona pacífica cuya conciencia no le permitió tomar las armas será juzgada por extremismo.
En 2013, Anton se casó con Ekaterina. Es ama de casa, le encanta dibujar, coser, patinar. La pareja tiene una hija, Milana.
La persecución penal cambió toda la vida de la joven familia. A Anton le preocupa que su familia pueda perder a su esposo y padre. "Ahora estoy criando a una hija de 5 años", dice. "Y en el caso de un veredicto de culpabilidad y el cumplimiento de una sentencia, veré a mi hija cuando tenga 15 años. Crecí sin padre, sé lo difícil que es. Me prometí a mí misma que nunca repetiría los errores de mi padre y que nunca dejaría a mi hijo. Y luego hay un caso penal... Los familiares de Antón también están muy preocupados por lo que está sucediendo y no entienden por qué está siendo perseguido.