El Tribunal Supremo de Tartaristán aprobó la condena de Sergey Gromov. Un creyente pacífico irá a una colonia penal durante seis años por sus opiniones religiosas

El 9 de febrero de 2024, el Tribunal Supremo de la República de Tartaristán rechazó la apelación del testigo de Jehová Sergey Gromov contra la sentencia y la confirmó: 6 años y 1 mes de prisión en una colonia penal. El creyente puede apelar esta decisión ante el tribunal de casación.

En la apelación, el abogado del acusado enfatizó que tal veredicto era inconstitucional: "El tribunal de primera instancia no protegió a Gromov de la discriminación religiosa contra los testigos de Jehová".

Otros tres testigos de Jehová de Tartaristán fueron condenados a diversas penas en colonias penales, un total de 13 residentes de esta región son perseguidos por su fe.