En Krasnoyarsk, un padre de dos niños pequeños fue condenado a 6 años de prisión por creer en Jehová Dios. Aleksandr Filatov lleva más de un año bajo custodia
Territorio de KrasnoyarskEl 28 de diciembre de 2022, en Krasnoyarsk, el juez Sergey Gruzdev del Tribunal de Distrito de Oktyabrskiy declaró culpable a Alexander Filatov, testigo de Jehová de 38 años, y lo sentenció a seis años de prisión. Este es el plazo exacto que solicitó el fiscal para el acusado.
Aleksandr y su esposa Yelena tienen dos hijos. Poco antes del inicio del proceso penal, la familia se trasladó de Krasnoyarsk a Novorossiysk. En julio de 2021, Konstantin Zhuikov, investigador del Comité de Investigación del distrito de Oktyabrsky de Krasnoyarsk, inició una causa penal contra Filatov. El creyente fue acusado de organizar las actividades de una organización extremista, y su caso fue separado de la causa penal contra Andrey Stupnikov. La casa de Filatov fue registrada, fue detenido y llevado a 5.000 kilómetros de su nuevo hogar, y fue colocado en el Centro de Detención Preventiva No. 1 en Krasnoyarsk, donde permaneció durante aproximadamente un año y medio hasta que se emitió el veredicto. Yelena, junto con sus hijos, que en ese momento tenían dos años y medio y diez años, se vio obligada a regresar a Siberia para estar más cerca de su esposo.
La causa penal contra Aleksandr Filatov llegó a los tribunales en enero de 2022. Los cargos se basaron en los testimonios de dos testigos secretos. Durante la audiencia, el creyente declaró repetidamente su inocencia. "La Biblia ha sido mi manual desde la infancia. Trato de aplicar sus principios en mi vida, incluido el principio 'ama a tu prójimo como a ti mismo'. El concepto de 'extremismo' es extraño para mí", explicó al tribunal. La sentencia de Filatov no ha entrado en vigor y puede ser recurrida. El creyente insiste en que es completamente inocente.
En el territorio de Krasnoyarsk se han iniciado un total de 19 causas penales contra testigos de Jehová, 6 de las cuales ya han sido condenadas.
En julio de 2022, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos dictó una sentencia que declaraba infundado el enjuiciamiento de testigos de Jehová en Rusia por cargos de extremismo. En particular, señaló que "en ausencia de expresiones que busquen incitar o justificar la violencia o el odio basado en la intolerancia religiosa, cualquier entidad religiosa o creyente individual tiene derecho a proclamar y defender su doctrina como la verdadera y superior y a participar en disputas y críticas religiosas que busquen probar la verdad propia y la falsedad de los dogmas o creencias de los demás" (§ 153).