El Tribunal Regional de Krasnoyarsk confirmó la sentencia de Anton Ostapenko: una sentencia suspendida de seis años por creer en Jehová Dios
Territorio de KrasnoyarskEl 7 de abril de 2022, el Tribunal Regional de Krasnoyarsk no satisfizo la apelación contra la sentencia del testigo de Jehová Anton Ostapenko y confirmó la sentencia del tribunal de primera instancia: 6 años y 3 meses de prisión suspendida con un período de prueba de 4 años y 1,5 años de restricciones adicionales.
El veredicto ha entrado en vigor, pero Ostapenko considera que la acusación de organizar las actividades de una organización extremista es inverosímil y puede utilizar el derecho a apelar la decisión del tribunal en casación.
El creyente de 31 años nunca antes había sido llevado a responsabilidad administrativa o penal. Cuida de su madre discapacitada. Los colegas de Ostapenko en la central eléctrica regional de Berezovskaya lo conocen como una persona decente y un trabajador responsable.
El enjuiciamiento penal de Anton Ostapenko comenzó en abril de 2019, cuando se llevaron a cabo registros masivos en la ciudad de Sharypovo en los apartamentos de ciudadanos sospechosos de practicar la religión de los testigos de Jehová. Ostapenko pasó seis meses en un centro de detención preventiva, donde, según él, se le presionó. También hubo amenazas contra su familia. Debido al estrés prolongado, la salud del creyente se deterioró.
La acusación de Ostapenko se basó en sus conversaciones sobre la Biblia, grabadas con una cámara de video oculta. En la acusación, se acusa al creyente de que "llevó a cabo una actividad activa en la celebración de reuniones, expresada en discursos públicos, discusión de escrituras bíblicas, oraciones". Tales acciones son una práctica común para los testigos de Jehová en todo el mundo.
La persecución de los testigos de Jehová en Rusia continúa a pesar de que el Pleno del Tribunal Supremo de Rusia aclaró que las reuniones litúrgicas y las conversaciones sobre la Biblia no pueden considerarse extremismo en sí mismas. El presidente del Tribunal Supremo, Viacheslav Lebedev, subrayó además el 9 de febrero de 2022: "Las acciones que no contienen signos de extremismo y consisten únicamente en el ejercicio del derecho a la libertad de conciencia, la libertad de religión, incluso mediante la realización de ritos y ceremonias religiosas, no constituyen un delito".