En relación con la decisión del Tribunal Supremo, la alumna se enfrenta a ser trasladada a otra forma de educación

El 17 de mayo de 2017, E. Mikhalevskaya, directora de la escuela de la aldea de Tomilino (región de Moscú), en presencia del psicólogo de la escuela y del jefe de seguridad, entregó oficialmente a los padres de un estudiante de 8 años un documento en el que, con referencia a la decisión de la Corte Suprema contra los testigos de Jehová, Notificó la prohibición de "todas las acciones que no estén relacionadas con el proceso educativo" en el recinto escolar. "Si encontramos una violación de esta prohibición", advierte el director, " nos veremos obligados a denunciar la violación a la policía, al Departamento de Educación, y plantear la cuestión de transferir al estudiante a otra forma de educación". En respuesta a las preguntas de los padres, la directora dejó claro que conocía la religión de la familia. La niña cantó canciones de los testigos de Jehová y también habló de Dios con una compañera de clase.

Después de la decisión del Tribunal Supremo , este no es el primer caso de presión sobre los escolares, los incidentes tuvieron lugar en las regiones de Bashkortostán, Rostov y Kirov. De acuerdo con la legislación vigente en Rusia, los padres tienen un derecho preferente a la educación y crianza de sus hijos sobre cualquier otra persona. El Código de Familia impone a los padres el deber de velar por el "desarrollo espiritual y moral de sus hijos".