Historia del caso
En marzo de 2021, Vladimir Deshko, Yuriy Loginsky, Yuriy Moskalyov y Tatyana Velizhanina fueron detenidos por su creencia en Dios. Funcionarios del FSB y del Ministerio del Interior del Territorio de Krasnodar participaron en la detención de residentes de Sochi. Dos días después, el tribunal dictaminó detener a Deshko y Velizhanina en un centro de detención preventiva, y a Loginsky y Moskalev bajo arresto domiciliario. Por las conversaciones sobre Dios con los residentes locales, los creyentes fueron acusados de “participar en las actividades de una organización extremista”. Tatyana Velizhanina tuvo covid en un centro de detención preventiva. Ella y Deshko fueron puestas bajo arresto domiciliario después de 11 y 10 meses en un centro de detención preventiva, respectivamente. En febrero de 2022, la causa penal se presentó ante el Tribunal de Distrito Khostinsky de Sochi, y se le asignó al juez Konstantin Sidoruk. El 28 de marzo de 2022, declaró culpables a los creyentes y condenó a Velizhanina a 1 año y 5 meses, y a Deshko a 1 año y 4 meses de prisión, que en realidad cumplieron. Moskalev y Loginskiy fueron condenados a 2 años de prisión condicional sin restricción de libertad con un período de prueba de 2 años.
